Así lo afirmó la legisladora por medio de su cuenta Twitter la tarde de ayer sábado, tras dar una respuesta a sus comentarios de ofrecerse a pagar la deuda que supuestamente tiene la actriz Laisha Wilkins con un hombre que le ofreció un servicio de carpintería.
En su mensaje, la diputada por el estado de Puebla afirmó que únicamente se desempeña en el servicio público, por razones relacionadas con su convicción de apoyar al país, ya que afirmó, no tiene la necesidad de hacerlo.
No trabajo por necesidad, afirma
“No se confundan, yo no “trago” como dicen ustedes de sus impuestos, yo “trago” de mi marido –Mario Montero Rosano, hijo de Mario Montero, ex secretario de Gobernación estatal en el sexenio priista de Mario Marín-, afortunadamente trabajo por amor a mi país no por necesidad”
Ante dicha publicación, diversos usuarios de la misma plataforma se lanzaron en contra de la diputada, muchos de quienes le exigieron renunciar a las percepcionesque tiene como integrante de la Cámara alta.
“Entonces renuncie a su sueldo, diputada. ¡A ver si tanto amor”, “¡O que lo done a gente que necesita ayuda, si viene a presumirnos que su esposo lo mantiene y el sueldo que recibe del país le es indiferente, pues que haga algo bueno con él, al fin que dinero le sobra”, “¡Ya quítenle el celular a esta pseudeodiputada, cada vez se hunde más!”.
Cabe recordar que Salvatori Bojalil dio de qué hablar en meses pasados cuando presumió a través de un video, su intención de repartir pollos rostizados a pobladores de San Jerónimo Tecuanipan en Puebla, para sus cenas navideñas.