Entre los hombres y mujeres jornaleros había algunos menores de edad en los campos de cultivo cosechando sandía, bajo el sol y el intenso calor.
Desde las 8 de la mañana, los trabajadores, acompañados de infantes, salieron al campo pese a que el termómetro ya marcaba los 31 grados. El pronóstico marca que hacia mediodía, la temperatura llegue a los 38 o 40 grados.
De acuerdo con archivos periodísticos, los indígenas que realizan trabajo agrícola aún siguen expuestos a situaciones de explotación
En mayo pasado, El Diario reportó casos de trabajo infantil en la zona agrícola ubicada en la carretera Meoqui-Rosales y Congregación Ortiz-Delicias, a 70 kilómetros de la ciudad de Chihuahua.
Niños de no más de 9 años fueron captados en los campos recolectando cebollas pese a que la Ley Federal del Trabajo impide a los menores exponerse a este tipo de labores que pueden poner en riesgo su integridad y desarrollo.