Los astrónomos de la NASA detectaron varios temblores en la superficie lunar y comentaron que esto lo está ocasionando los restos de un módulo estadounidense, el Apolo 17, el cual fue abandonado.
Comentan que la actividad sísmica en la Luna fue captada gracias a un análisis de datos que mandó el mismo Apolo 17 ya que contiene varios instrumentos para detectar terremotos térmicos lunares.
Al parecer esto se debe a que en la Luna predomina un ambiente extremo con temperaturas entre los -133 grados centígrados en la oscuridad y 121 grados centígrados bajo el Sol directo, lo cual provoca que se expanda y se contraiga en repetidas ocasiones.
Estas acciones también hacen que el Apolo 17 se contraiga y se expanda de una manera que hace que la Luna se llene de vibraciones, lo cual todo junto hace que se den temblores imperceptibles.
Los especialistas comentan que esto se está dando cada vez más seguido pero que no es algo que represente peligro alguno y que no afectarán en nada a la Luna ni en las cosas que influyen en la Tierra.