Durante las celebraciones del Eid al-Fitr, un evento que marca el término del mes del ayuno del Ramadán, las personas solían comprar dátiles y otros frutos en los puestos ambulantes. Sin embargo, los comerciantes comentan que en este año las ventas bajaron porque solo unos cuantos clientes salieron a comprar.
Asimismo, otro problema que alarma a la población es el aumento del precio en los alimentos y la disminución de los ingresos por la falta de empleo.
Ante esta situación, se han creado estrategias más flexibles. El gobierno ha optado por delegar el poder a las autoridades locales, para que los bloqueos se ajusten a las situaciones de cada área y crearon programas de raciones de alimentos, con el fin de disminuir el impacto del incremento de precios. No obstante, los residentes y comerciantes consideran que estos apoyos aún no son suficientes para superar una crisis de esta magnitud.
Con información de Excelsior