Dijo que son 230 niños quienes cuidan en las nueve guarderías, recibiendo éstas 950 pesos por cada uno al mes y además cada padre de familia abona a la semana entre 200 y 250 pesos para la compra de alimentos o utensilios que necesitan para su desarrollo.
No obstante, si se elimina el subsidio del Gobierno Federal, cada padre de familia tendría que multiplicar la cuota semanal, lo que vendría a afectar su bolsillo; o en caso contrario, tendrían que renunciar a su empleo o estudios para poder cuidar a sus hijos ellos mismos.
Lozoya añadió que, es por ello, que si no se llega a un acuerdo mediante la reforma constitucional en contra la medida ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, surge de la inmediata reacción que han tenido las madres de familia que recibían el servicio desde el 11 de enero de 2007.
“Podremos hacer una aportación de la cantidad que faltaría del Gobierno Federal”, anunció el Munícipe, buscando que los papás mantengan la misma cuota. No obstante, reconoció que no se tenía presupuestado ese dinero, por lo cual se tendrían que hacer ajustes en el Ayuntamiento.
Destacó que el propósito es que los papás beneficiarios de este programa no tengan afectaciones en su vida cotidiana. Hay madres y padres solteros que trabajan y tienen que mantener un hogar; incluso hay quienes que siguen estudiando, agregó. Por lo cual se busca que sigan haciendo lo mismo sin que se vea afectada su cotidianidad y bolsillo.
“El fin es que no se les aumenten la cuota a los papás y el Municipio siga apoyando el programa en lo que el Gobierno Federal decide qué hacer”.
PRESENTAN LOS BENEFICIOS
Madres de familia y encargadas de estancias infantiles, presentaron al Alcalde cómo es que funcionan y los beneficios que les traen, así como los perjuicios en caso de que cancelen el apoyo federal.
Tal es el caso de Rebeca Aguirre, encargada de una guardería de la colonia Juárez, quien explicó sobre los apoyos del gobierno y las cuotas semanales que pagan los papás, así como los horarios. Dijo que desde enero han estado afectadas por los recortes, pues no han recibido apoyo.
Ana Luisa Persona subrayó que tiene a dos hijas en una estancia y antes otros dos niños. Agregó que estando ahí los niños aprenden mucho y les dan un excelente trato.
Johana Rodríguez destacó que tanto su esposo como ella trabajan para mantener la casa, es indispensable dejar a sus hijos en una estancia, donde los cuidan con buenos tratos y aprenden. “Si nos quitan el apoyo nos quitarían mucho”.
Lluvia Loya dijo tener a su bebé de un año y siete meses en una estancia, pese al dolor de dejarlo a tan corta edad, tiene que mantener el hogar. “Ahora que se acorte el presupuesto no sé cómo le voy a hacer para pagar ese dinero extra. La mayoría somos madres solteras y merecen el apoyo de la comunidad”.
A lo que el Alcalde respondió que afectar a los menores no es la ruta adecuada, el Municipio buscará una solución. “No lo tenía presupuestado para este año, pero podemos hacer algo para que las estancias infantiles sigan adelante y puedan contar con este servicio”.