Este fin de semana, un vuelo proveniente de Bangkok, Tailandia, se salió de la pista de aterrizaje y se estrelló contra una pared en el perímetro del aeropuerto internacional de Muan a unos 300 kilómetros al sur de la capital de Seúl, Corea del Sur.
El avión era un Boeing 737-800 perteneciente a Jeju Airlines y en él viajaban 181 personas, 175 pasajeros y seis tripulantes, de las cuáles se ha confirmado que 179 perdieron la vida al momento del accidente.
Los equipos médicos y de rescate han informado que de los 179 fallecidos, 85 eran mujeres, 84 eran hombres y otras 10 personas son de sexo indefinido ya que fueron consumudos por las llamas y quedaron irreconocibles.
Se dice que los únicos dos sobrevivientes son un hombre de 33 años y una mujer de 25 años, ambos miembros de la tripulación. Se dice que están conscientes y que su vida no corre peligro.