El receptor Quintez Cephus y el safety C.J. Moore, ambos de los Lions de Detroit, y el defensive end de los Commanders de Washington Shaka Toney, recibieron suspensiones indefinidas, mientras que los wide receivers de los Lions Stanley Berryhill y Jameson Williams fueron sancionados con seis partidos.
Cephus, Moore y Toney quedaron suspendidos de forma indefinida al menos hasta que concluya la temporada 2023 por apostar en partidos de la NFL en la campaña del 2022, y pueden solicitar su regreso una vez que termine la campaña.
Berryhill y Williams fueron suspendidos por colocar apuestas no relacionadas con la NFL desde una instalación de la Liga. Pueden participar en todas las actividades de la temporada baja y pretemporada, incluidos partidos, y sus suspensiones iniciarán una vez que se haga el último recorte de rosters.
Los Lions dieron de baja a Cephus y Moore el viernes.
El vicepresidente ejecutivo y gerente general de los Lions, Brad Holmes, dijo en un comunicado que los jugadores «mostraron toma de decisiones que no van de acuerdo con nuestros valores como organización y significan una violación a las reglas de la liga».
Holmes también señaló que el equipo trabajará con Stanley y Jameson «para asegurarse de que comprendan la gravedad de estas violaciones y tengan en claro las reglas de la liga en el futuro».
Los Commanders señalaron en un comunicado que el equipo «ha cooperado plenamente con la investigación de la NFL desde que recibió el aviso y apoya los hallazgos y acciones de la Liga».