«Occidente está pidiendo abiertamente a Kiev que ataque a Rusia, incluso con armas recibidas de los países de la OTAN», ha protestado la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zajarova, haciendo mención a las recientes declaraciones en ese sentido del viceministro británico de Defensa, James Heappey.
Zajarova cree que estas declaraciones de los socios de Ucrania «evidencian» que «el régimen» del presidente, Volodimir Zelenski, «no es independiente» y que «depende completamente» de «agentes externos» para tomar sus decisiones, como demuestra, ha dicho, que Kiev haya bombardeado ya regiones fronterizas.
En ese sentido, Zajarova ha alertado tanto a Kiev como al resto de «capitales occidentales» de que deberían «tomarse en serio» las advertencias del Ministerio de Defensa ruso «de que más provocaciones para atacar objetivos rusos conducirán a una dura respuesta» por parte de las tropas del Kremlin, informa la agencia TASS.
Esta semana, el viceministro de Defensa británico defendió el derecho «legítimo» de Ucrania a atacar objetivos militares en territorio ruso para cortar los suministros y la capacidad bélica de Moscú.
«Ucrania debe golpear a sus oponentes para atacar sus líneas logísticas, suministros de combustible y depósitos de armas. Esto es parte de la guerra», insistió Heappey, quien obtuvo respuesta poco después por parte de Rusia.
«La provocación directa de Londres al régimen de Kiev para llevar a cabo tales acciones, en el caso de un intento de implementarlas, conducirían de inmediato a nuestra respuesta proporcional», avisó el Ministerio de Defensa de Rusia.