El “Jefe Meléndez”, como mejor lo conocen dentro de las filas de la institución municipal, está a punto de jubilarse, y aunque todavía se siente capaz y con muchas fuerzas para continuar formando a las nuevas generaciones de policías, en mayo próximo tendrá la oportunidad de destinar más tiempo para sí mismo y para su familia, tiempo que durante tres décadas ha dedicado a la preparación de los futuros guardianes del orden.
La disciplina, honestidad y lealtad que ha demostrado hacia la corporación que lo vio nacer como policía, le han otorgado el grado de “oficial”, uno de los más altos rangos a que un agente dentro del municipio de Chihuahua puede aspirar y con el cual orgullosamente se irá a casa.
Aunque el oficial Meléndez ha pasado por diversas áreas dentro de la Dirección de Seguridad Pública, fuera patrullando en calle o como agente del grupo ciclista, debido a la preparación y al perfil que tiene como docente y que en gran parte adquirió dentro del Ejercito Mexicano, institución a la que también perteneció en sus inicios, fue asignado a la que en aquel entonces se llamaba academia, posteriormente escuela y actualmente Instituto Superior de Seguridad Chihuahua (ISSCUU), donde cientos de mujeres y hombres han sido beneficiados con sus enseñanzas.
“He visto cómo muchos de mis compañeros que actualmente laboran como policías, se han desarrollado dentro de esta hermosa carrera policial tanto en ésta como en otras instituciones del estado y eso me llena de satisfacción. Incluso el actual titular de la dependencia, comisario Julio César Salas González, fue mi alumno y después compañero, pues él también era parte de la plantilla de formadores hace algunos años”, lo expresa con gran orgullo el oficial Meléndez.
“Amo mi profesión, vengo de una familia de policías, mi padre era militar, mi hijo y dos hermanos son policías de la DSPM, además de tres sobrinos que también decidieron servir y proteger a la comunidad chihuahuenses”, agregó.
Entre la basta cantidad de conocimientos con que cuenta, el oficial Meléndez se ha preparado también en el extranjero en técnicas SWAT, en disciplina y capacidad física, función policial, liderazgo y protección corporal, etcétera. Además, profesionalmente cuenta con dos licenciaturas y una maestría, logros que pocos han alcanzado dentro de las filas.
“A las nuevas generaciones les digo que se cuiden al realizar sus labores, siempre los esperarán en casa. No dejen de prepararse y entrenar, para poder servir mejor a los chihuahuenses de la mejor manera. La puerta del éxito abarca la disciplina y el respeto, son la mejor vía para poder cumplir sus objetivos”.