El diario WSJ publicó la noche del viernes que los asesores de Trump aceleran e intensifican su trabajo en impulsar las deportaciones de indocumentados.
El gobierno de Trump iniciará en el próximo mes de enero y sus colaboradores pretenden que se realice una declaración de emergencia nacional para usar recursos, bases y elementos militares para detener y expulsar a los migrantes, así como retomar la construcción del muro fronterizo.
Es de añadir, que según las últimas elecciones, Trump cuenta con el apoyo mayoritario en la Cámara de Representantes y el Senado. Primeramente se concentrarían en la expulsión de migrantes sin documentos y que recibieron órdenes de expulsión, que son unos 1.3 millones.
Y el medio estadounidense escribió: «Están planeando entablar negociaciones agresivas con México para revivir la política de ‘Quédate en México’«.
Dicho programa requiere la aprobación del Gobierno de México, pues estarían los migrantes en territorio mexicano mientras esperan la resolución de la petición de asilo.
Trump implementó dicho programa en su anterior presidencia, que obligaba a los migrantes a esperar fuera de Estados Unidos la aprobación de su solicitud de asilo humanitario, lo que sigue ocurriendo en la administración de Biden.
Alegó el próximo presidente que es necesario un esfuerzo agresivo de deportación para que el país vuelva a encarrilarse después de que se estima que ocho millones de inmigrantes ingresaron ilegalmente a Estados Unidos durante la Administración Biden.