“Es un hecho que en Coahuila se va a exigir el certificado de vacunación Anti-COVID, requisito que será obligatorio para poder entrar a restaurantes, comercios, bares, antros, estadios deportivos y todo tipo de lugares y eventos”, fueron las palabras del Gobernador.
A partir de esta semana intensificaron las campañas para concientizar y vigilar negocios por la pandemia de COVID-19 mientras repuntan los contagios en Coahuila por la tercera ola, de la mano de muchos ciudadanos que volvieron de sus destinos turísticos contagiados.
“Nuestro comercio y nuestra industria no aguantarían un retroceso”, aseveró Riquelme al referir que no pretenden volver a las restricciones para cerrar negocios, cuando la prioridad es vacunar, sobre todo a los jóvenes que faltan.
Pedirá a los negocios integrantes de las cámaras de restaurantes que se sumen para que sea obligatorio el certificado de vacunación de COVID-19 en los 38 municipios que tiene la entidad.
No empezarán ya pero la prioridad serán Saltillo y los municipios del sureste. Luego llevarán la medida a la Laguna (Torreón y conurbados), el norte, el centro-desierto y la región carbonífera de Coahuila.
Como Mazatlán.
A partir del 2 de agosto el municipio de Mazatlán también exigirá a sus ciudadanos el certificado de vacunación en prácticamente todos los espacios públicos y compartidos.
El Gobernador de Sinaloa manifestó rechazo a la medida que impulsa el Alcalde de Mazatlán.
Coahuila aunque no tiene para cuándo sigue los mismos pasos que la ciudad de Mazatlán y se convertiría en el primer estado que hace obligatorio el certificado.
Lamenta el mandatario Riquelme que tras las vacaciones subieron a 130 hospitalizados cuando tenían 60 o menos desde hace semanas, especialmente por casos recién importados de Mazatlán y otras playas.