Pemex indicó que, de las ayudas recibidas del Gobierno en 2023, 45 mil 400 millones de pesos fueron aportes de capital para pago de deuda y unos 25 mil 600 millones fueron para la Refinería Olmeca.
La Refinería de Dos Bocas entrará en marcha finalmente en las «próximas semanas», según el director general de Pemex, Octavio Romero.
La deuda financiera de la petrolera estatal mexicana, la mayor empresa del País, cerró el cuarto trimestre del año en 106 mil 100 millones de dólares, por encima de los 105 mil 800 millones de dólares al cierre del trimestre previo.
Pemex cifró sus vencimientos de deuda para 2024 en 8 mil 800 millones de dólares y para 2025 en 6 mil 800 millones de dólares.
Su deuda con proveedores terminó en 359 mil 760 millones de pesos, 27.5 por ciento más que al cierre de 2022. Al respecto, Pemex sostuvo que pagó 413 mil 937 millones de pesos a proveedores en 2023, frente a 441 mil 262 millones el año previo.
Los ingresos totales de Pemex disminuyeron 17 por ciento interanual, a 425 mil 532 millones de pesos en el periodo octubre-diciembre.
La compañía reportó una utilidad neta de 106 mil 936 millones de pesos en el cuarto trimestre del año pasado, frente a una pérdida de 95 mi 502 millones de pesos registrada en el mismo lapso de 2022, gracias a menores impuestos como parte de los apoyos adicionales del Gobierno, así como una disminución de gastos y costos de ventas.
Sin embargo, Pemex registró un flujo operativo (Ebitda) de 60 mil 504 millones de pesos en el último cuarto de 2023, lo que significó 34 por ciento menos que en el mismo trimestre de un año antes.
Asimismo, la empresa del Estado reportó un capital de trabajo negativo por 574 mil 200 millones de pesos.
Pemex reportó una producción de crudo y condensados de 1.86 millones de barriles de petróleo por día (bpd) al cierre del cuarto trimestre de 2023, y un procesamiento de crudo local de 731 mil bpd, una caída de 13 por ciento.
La petrolera prevé una producción hidrocarburos líquidos de 1.88 millones de bpd en 2024.
Carece Moody’s de seriedad.- Romero
Octavio Romero apuntó que, ante los resultados de la empresa, no es entendible la baja en la calificación realizada por Moody’s, a la cual acusó de carecer de seriedad.
«La agencia calificadora Moody’s, con metodologías propias y asumiendo escenarios inventados, decidió bajar la evaluación crediticia de Pemex. A diferencia de lo que supone la calificadora, no hay razones para asumir menor voluntad del Gobierno federal para seguir respaldando a la empresa», dijo el director de Pemex durante su conferencia ante inversionistas.
«Pemex niega categóricamente lo asumido por Moody’s. En nuestra opinión, la calificadora carece de seriedad al asumir esas consideraciones. Es irresponsable pensar en escenarios pesimistas que carecen de sustento y no corresponden con los hechos con la vulgar pretensión de incrementar las tasas de interés», añadió Romero.
El pasado 9 de febrero, la calificadora Moody’s rebajó la nota crediticia de Pemex de B1 a B3 ,con perspectiva negativa, ante sus altos riesgos financieros.
Con información de Diana Gante