«Nos unimos para manifestarnos con una sola voz en contra de los mega proyectos nacionales y trasnacionales, de un Gobierno que continúa favoreciendo la imposición de estos proyectos como el Tren Maya, el Corredor Transístmico, Zonas Económicas Especiales, el Proyecto Integral Palenque-Cancún, el proyecto de construcción de presas hidroeléctricas y concesiones mineras, entre una gran lista que sigue minando y destruyendo la naturaleza y que ponen en riesgo nuestra existencia como pueblos originarios», expusieron.
Los integrantes del Movimiento en Defensa de la Vida y el Territorio también acusaron que la Administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador no ha significado un verdadero cambio político en el País.
A los pueblos originarios, advirtieron, no se les respetó su derecho a decidir, mediante consulta, sobre los proyectos que los afectan de manera directa.
«No más consultas amañadas, exigimos rehabilitación de las carreteras ya existentes», expuso uno de los manifestantes al dar lectura a un comunicado.
También se pronunciaron contra el despliegue de la Guardia Nacional en distintas zonas, pues es una forma de militarización e intimidación social.
Los inconformes demandaron que se generen las condiciones necesarias para que los municipios de Chilón y Sitalá puedan volver a la elección de sus autoridades mediante el sistema de usos y costumbres.
La movilización, en la que participaron representantes de la Iglesia católica, concluyó con un pronunciamiento frente al Palacio de Gobierno estatal.