El 2 de noviembre, en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la Coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, había hecho una Declaratoria de Desastre Natural por la ocurrencia de lluvia severa, vientos fuertes, inundación fluvial y pluvial el 24 y 25 de octubre de 2023 en 47 municipios de Guerrero.
Pero el viernes, en una edición vespertina del DOF, hizo una «nota aclaratoria» para declarar en emergencia sólo a 2 municipios: Acapulco y Coyuca de Benítez.
Los municipios eliminados no serían favorecidos con fondos emergentes o dispensas en contratación de obras para acelerar las tareas de reconstrucción. La Segob no ha dado ninguna explicación de la súbita eliminación de 45 municipios y cuáles serían las consecuencias.
Ajuchitlán es uno de los municipios borrados de la emergencia. Ahí, el puente que comunica con San Miguel Totolapan y la carretera, quedaron partidos.
«Nos ha tomado por sorpresa, porque no fue de alguna manera mencionado Ajuchitlán en el plan emergente.
Necesitamos apoyo», externó Himbert Campos, vocero del Ayuntamiento. «No todo es Acapulco, el panorama es desolador», manifestó.
El Edil de San Marcos, Tomás Hernández Palma, pidió reconsiderar la devastación en los demás territorios.
«Pareciera que no hay orden (en la declaratoria de desastre). Hasta ayer (viernes) todavía dos comunidades (del municipio) estaban marginadas. (Aquí) hay cerca de 250 viviendas afectadas, dos puentes colapsados y techumbres de escuelas por los suelos», alertó.
El senador priista Manuel Añorve cuestionó la decisión de Protección Civil.
«Es inaceptable declarar sólo 2 municipios como zona de desastre natural luego de lo ocurrido con el huracán ‘Otis’. Esta es una muestra de su insensibilidad ante la tragedia que viven las y los guerrerenses. Exigimos la restitución inmediata de la declaratoria original», reclamó en redes el funcionario, ex Alcalde de Acapulco.
El panista Juan Carlos Romero Hicks cuestionó la decisión de Segob. «La insensibilidad e indiferencia ante la tragedia en #Guerrero, parecen no tener límites».
Anoche, en un mensaje, la Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, hizo un balance de las acciones efectuadas tras la emergencia por ‘Otis’ y anunció apoyos, pero sólo para zonas dañadas de Acapulco y Coyuca.
‘No sólo es Acapulco, necesitamos apoyo’
Luego de que el Gobierno federal «rasuró» de la declaratoria de desastre a 45 municipios, representantes de Ayuntamientos afectados urgieron ayer a las autoridades a considerar la devastación en sus territorios.
«Veo preocupación con estos vaivenes (de poner y quitar a municipios de la declaratoria de desastres), pareciera que no hay orden, y creo que es la realidad lo que deberían de estar atendiendo», dijo a REFORMA el Edil de San Marcos, Tomás Hernández Palma.
«Hasta ayer (viernes) todavía dos comunidades estaban marginadas, lo que provocó que la gente no pudiera transitar, ayer pudimos ya liberar a todos con maquinaria que hemos contratado porque el municipio no la tiene, pero tengo un compromiso con la gente, y no podía esperarme a ver a qué hora llega la ayuda del Gobierno federal, yo esperaría que pudieran considerar a San Marcos».
Enlistó que en el municipio aledaño a Acapulco, «Otis» dejó cerca de 250 viviendas afectadas, dos puentes colapsados y techumbres de escuelas por los suelos, por lo que las clases están suspendidas.
En Ajuchitlán el puente que comunica con San Miguel Totolapan y la carretera quedaron partidos.
«No todo es Acapulco, el panorama es desolador, a este municipio el huracán lo golpeó bastante fuerte, el puente se partió, se dañó el terraplén, hay cinco cortes en la carretera», alertó Himbert Campos, vocero del Ayuntamiento de Ajuchitlán.
«Nos ha tomado por sorpresa (que no consideren al Municipio en la declaratoria de desastre), sobre todo nos ha dejado ‘standby’ en el tema de saber qué va a suceder, porque tampoco Ajuchitlán fue mencionado en el plan emergente y en el presupuesto para la reconstrucción de Guerrero; de alguna manera estamos en espera de que las autoridades tanto estatales como federales pues den una solución pronta, necesitamos apoyo».
«Se perdieron los caminos y puentes que van a (las localidades) Gómez Farías, Reparo y San Rafael, están aisladas y aún no tenemos ayuda federal ni estatal», reclamó.
«Se desaparecieron los cultivos de la gente, perdieron su ganado, chivos, cerditos y aves de corral, ahora los están enterrando para evitar algún brote».
El 25 de septiembre, un día después de que «Otis» azotó las costas de Guerrero, el Ejército implementó el Plan DN-III de apoyo a la población civil en 10 municipios.