“Estamos desde la semana pasada, sobre todo los transportistas que tenemos con Sonora, hemos estado varios días que se ha estado interrumpiendo el paso de todos los vehículos, no nada más de carga por la nieve, ahorita desde el sábado no ha podido transitar la carga en ninguno de los dos sentidos y ahí no hay otra más que esperarnos o regresar hasta Durango para poder llegar por la ruta de playa”, mencionó.
Dijo que esto trae afectaciones, sobre todo a los operadores, por tener que soportar el frío dentro de sus unidades, además de que se retrasan en la entrega de la mercancía.
En el caso de quienes se desvían por Durango los costos de los fletes se incrementan, indicó.
“Hoy en la mañana (ayer), amanece nevado Sueco, casi a la mitad del camino con Chihuahua, ha estado transitando la carga, pero si esto sigue así, va a llegar un momento en que se cristalice y la Guardia Nacional ya no nos va a dejar pasar”, mencionó.
El líder de los transportistas dijo no tener el número exacto de las unidades afectadas, ya que provienen de diferentes partes del país.
“Vienen del punto alto de la sierra y es muy fácil que, pueda estar haciendo incluso calor acá con nosotros y allá está cerrado por cristalizamiento de las carreteras o porque hay nieve como en este caso”, comentó.
La situación inició el pasado martes y de acuerdo a los pronósticos, el clima permanecerá así toda la semana debido al frente frío que llega por Baja California Norte, se pasa a Sonora y afecta también a la entidad, indicó.
“Es algo que lo sufrimos todos los años por esta ruta, cada frente frío que a lo mejor aquí no percibimos, allá nos causa problemas un día o dos días, ahorita ya tenemos desde el sábado, esperemos que las autoridades hagan algo como echar sal”, comentó.
El tráfico de esa zona es porque Chihuahua es un estado de tránsito para las operaciones que provienen de Tamaulipas, Coahuila, Nuevo León hacia Sonora, las Bajas Californias e incluso Sinaloa, refirió.
Dijo que aún no se tiene un estimado de la afectación económica por el retraso, pero el problema es que para colocar sal en el pavimento tendrían que ponerse de acuerdo los gobiernos de Chihuahua y Sonora, lo cual regularmente no se hace.