En el tramo original ya se habían perdido 22 mil árboles, aunque el Gobierno aseguró que fueron trasplantados.
Organizaciones ambientalistas alertaron que con la construcción del nuevo trazo del Tren Maya se ha devastado la selva virgen, a lo largo de 120 kilómetros, sin que existan los estudios ambientales.
Trascabos fueron grabados en una zona de la selva arrasando con palmeras y otras especies endémicas en la zona paralela a la carretera 307, detrás de los complejos hoteleros.
Laura Patiño, presidenta de la asociación ambientalista Moce Yax Cuxtal, lanzó un llamado a detener las obras hasta que se tengan los estudios de viabilidad para saber si es la zona adecuada.
Aseguró que se carece de Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) y, por consiguiente, de todos los permisos y programas de rescate y reubicación tanto de flora como de fauna.
«No existen estudios geofísicos, hidrológicos ni de fauna ni de flora, no están tomando en cuenta las especies que están incluidas en la norma oficial mexicana 059. Ahí están especies tanto de flora como de fauna en peligro de extinción», refirió.
Durante un recorrido por la zona, ubicada a unos 4 kilómetros del fraccionamiento Real Marsella, al poniente de Playa del Carmen, comprobaron que hay un ancho de aproximadamente 50 metros de selva talada, con una extensión indeterminada, aunque va desde el norte (viniendo de Puerto Morelos) rumbo al sur (al municipio de Tulum).
Moce Yax Cuxtal ha estimado que en el nuevo trazo, que va de Cancún a Tulum, habrá una pérdida de 8 millones 736 mil árboles y plantas.
Patiño comentó que esa zona es el paso de fauna nativa como el jaguar y otras especies importantes; además, dijo, el nuevo trazo del Tren Maya pasa sobre una red muy grande de cavernas y de ríos subterráneos que son relevantes para el abastecimiento del agua en el área.