Explicó que el gobierno ya recibe 25 mil millones del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que se cobran a productos con alto contenido calórico que debieran usarse en programas destinados a mejorar la salud, para hacer espacios deportivos, a enseñar a tener una alimentación balanceada, pero no lo hacen. Durante el Informe general «Covid-industrial», explicó que si bien hay buena relación con el gobierno federal en general, hay quienes buscan linchar a la industria.
«Habrá uno o dos o tres personajes que tal pareciera que están haciendo un linchamiento a la industria. El tema del etiquetado, ya hicieron una norma con muchas presiones con mucho dinero de por medio en una denostación total y ahorita empujan en los estados, me refiero a Oaxaca y Tabasco donde empujan una ley» para prohibir esos alimentos. Le llaman chatarra a los alimentos y buscan prohibirlos, en lugar de pensar en elaborar políticas para educar a la población y generar una cultura de la buena alimentación.
Afirmó que esto afectará «tremendamente» a la economía, a un millón de empresas familiares, cuyas tienditas venden este tipo de productos, pero también a 9.2 millones de empleos ligados a la industria alimentaria. Cervantes añadió que el gobierno debiera reflexionar que estamos en momentos en que se debe abatir la pandemia y se quiere reactivar la economía, en momentos en que hay una crisis económica, «es una pena» que sigan con estas iniciativas. Por lo que bien se podría pensar en prohibir la venta de alimentos y bebidas con altos contenido de grasas, azúcares y sodios cerca de las escuelas, así como educar a la población. Hay que evitar crear una crisis financiera que complique más la crisis económica en la que estamos, porque será muy difícil salir de ellas, expuso.