El Brent subía 2.64 dólares, o 3.12 por ciento, a 87.22 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate de Estados Unidos (WTI) ganaba 2.90 dólares, o 3.44 por ciento, a 85.63 dólares. Ambos referenciales llegaron a avanzar más de 4 dólares en los primeros minutos de la sesión.
El alza de los precios invertía la tendencia bajista de la semana pasada -la mayor caída semanal desde marzo-, en la que el Brent perdió cerca de 11 por ciento y el WTI retrocedió más de 8 por ciento al intensificarse la preocupación por la demanda mundial debido al empeoramiento de las perspectivas macroeconómicas.
«Aunque el equilibrio subyacente entre la oferta y la demanda no se ha visto afectado, cualquier aumento de la tensión en Oriente Medio suele provocar un alza de los precios del petróleo, y esta vez no es diferente», afirmó Tamas Varga, de la correduría PVM.
Hamas lanzó el sábado el mayor ataque militar contra Israel en décadas, desencadenando una oleada de ataques aéreos israelíes de represalia sobre Gaza.
El estallido de violencia amenaza con hacer fracasar los esfuerzos de Estados Unidos por mediar en un acercamiento entre Arabia Saudita e Israel, en el que el reino normalizaría los lazos con la nación israelí a cambio de un acuerdo de defensa entre Washington y Riad.
Según informes, funcionarios saudíes dijeron el viernes a la Casa Blanca que estaban dispuestos a aumentar la producción el próximo año como parte del acuerdo propuesto con Israel. Riad y Moscú han acordado un recorte voluntario combinado de 1.3 millones de barriles por día hasta finales de 2023.