De esta forma, la Alianza Latinoamericana para la Pesca Sustentable y Seguridad Alimentaria (Alpescas), de la que México ocupa la Vicepresidencia, externó su preocupación ante la posibilidad de que estos barcos extranjeros entren en aguas patrimoniales, en una actividad ilegal que afecta la sustentabilidad y biodiversidad de los mares.
Las Islas Galápagos, que es una reserva marina declarada por la UNESCO como patrimonio de la humanidad, son consideradas un ecosistema muy frágil en el Océano Pacífico, por ser «un museo viviente y escaparate de la evolución», donde Charles Darwin realizó investigaciones para escribir su libro: El Origen de las Especies en 1859.
Es de suma importancia que los países del Pacífico Sur, tanto a nivel gubernamental como privado, tomen un posición al respecto y, a través de nuestras autoridades, se le presente una declaración a China que manifieste el malestar que ocasionan sus flotas, sobre todo teniendo en cuenta el daño que pueden ocasionar en la sustentabilidad de las especies y el equilibrio ecológico», manifestó Alpescas.
De acuerdo con la Armada de Ecuador, desde el pasado 16 de julio alrededor de 260 barcos con bandera china y redes de arrastre pescan en aguas internacionales, muy cerca de las Islas Galápagos, en una actividad que se repite por cuarto año consecutivo.
En 2017, la tripulación de un barco chino fue sentenciada en Ecuador a varios años de prisión por capturar ilegalmente tiburones martillo y tiburones sedoso en peligro de extinción.
México pone sus barbas a remojar
Humberto Becerra Batista, vicepresidente de la Alpescas, explicó que los países de la región levantan la voz, ante la posibilidad de que la flota china quiera pescar en cualquier momento en sus aguas nacionales.
El también presidente de la Cámara de las Industrias Pesquera y Acuícola (Canainpesca) en México, destacó que hasta el momento se tiene registrada la presencia de estos barcos extranjeros en Argentina, Perú, Chile y Ecuador.
El dirigente del sector adelantó que buscarán reunirse con el titular de la Secretaría de Marina (Semar), el almirante José Rafael Ojeda Durán, para alertar sobre esta situación, ya que no sólo la flota china sino también la española aprovecha la falta de inspección y vigilancia para depredar los mares patrimoniales.
Países en desarrollo
Un estudio publicado por el Instituto de Desarrollo de Ultramar de Gran Bretaña (ODI, por sus siglas en inglés), advierte que los barcos de muchas naciones industrializadas, especialmente de China, se trasladan hacia aguas territoriales de los países de bajos ingresos para satisfacer la creciente demanda de pescados y mariscos en su territorio.
La investigación establece que en las Zonas Económicas Exclusivas (ZEE) de los países en desarrollo, 84 por ciento del esfuerzo pesquero industrializado proviene de otros países, y 78 por ciento de embarcaciones con bandera de países de ingresos altos y medios altos.
ODI alerta que se necesita más trabajo para explorar los impactos ecológicos, sociales y económicos de la flota china en los países en desarrollo, y para investigar el comportamiento de las empresas transnacionales que participan en estas capturas, particularmente aquellas registradas en países con bandera de conveniencia y paraísos fiscales.
Con información de Excélsior