En un comunicado conjunto, emitido por el citado ministerio, los dos países han anunciado que el próximo viernes se enviarán caravanas para permitir el regreso a sus lugares de residencia a los 40 mil desplazados que residen en Rukban, donde las Naciones Unidas ha denunciado que las condiciones son terribles.
«Partiendo de los más altos principios del humanismo el gobierno sirio, en coordinación con Rusia, formará el 1 de marzo convoyes humanitarios adicionales para el regreso voluntario y sin obstáculos de los residentes del campamento de Rukban a sus lugares de residencia», reza el documento, retomado por la agencia Sputnik.
Estos convoyes se dirigirán a las localidades de Al Jalidiya, Al Amara, Palmira, Mheen, Al Qaryatayn, en los suburbios de Damasco, así como a Homs, Raqqa y Alepo, precisó el comunicado conjunto.
Según Moscú y Damasco, el paso de los convoyes por la «zona ilegalmente ocupada por Estados Unidos cerca de Al Tanf para la evacuación de los refugiados del campo de Rukban se llevará a cabo en coordinación con la ONU».
«Instamos a Estados Unidos, cuyas unidades militares están emplazadas ilegalmente en Siria, a abandonar el país», reclamaron.
Miles de refugiados sirios enfrentan duras condiciones de vida en el campamento de Rukban, cerca de la frontera entre Siria y Jordania, a pesar de los intentos rusos de establecer «corredores humanitarios» en la región.
La petición rusa y siria se produce después de que Estados Unidos haya informado de que mantendrá a 400 efectivos en Siria tras el repliegue anunciado inicialmente por el presidente Donald Trump.
Información de Notimex