Guachochi.- Un nuevo caso de bullyng se presentó, en esta ocasión la atacante de 10 años intento matar a su vecina de 7 llamada «Nachita», quien se encuentra hospitalizada luchando por su vida.
A través de un reporte anónimo hasta la sala de redacción de este medio informativo nos llegó la historia que aconteció el pasado 21 de marzo, en la colonia aeropuerto en las inmediaciones del Panteón Municipal en la ciudad de Guachochi.
Testigos aseverán la pequeña nachita era atacada constantemente por su vecina a quien conocen como «la güera» , los ataques iniciarán con gritos, desprecios, palabras racistas, humillaciones y en los últimos días llegaron a los golpes, en son de juego la güera amenazaba con matar a nachita.
El pasado 21 de marzo un grupo de niñas jugaban en el panteón que está cerca de sus viviendas, arribó hasta el lugar «la güera » e inició una pelea con Nachita a quien le gritaba que la mataría.
Nachita es mucho más pequeña que su agresora no tuvo oportunidad de hacer algo para su defensa, testigos ( los testigos son niñas que oscilan entre 6-10 años) señalan ella solo intentaba huir, no logró escapar de las manos que rodeaban su cuello y poco a poco dejaba de luchar.
En ese momento una de las menores consiguió persuadir a la güera de que parará, ella accedió y salió corriendo.
Las pequeñas asustadas y temerosas de los ataques llevaron a Nachita a su casa.
La madre de la pequeña quien nos otorgó una entrevista vía telefónica platicó que esa noche vio a su hija extraña y con dificultad para respirar, cuando la revisó encontró en su cuello » una bola» que crecía y esto ocasionaba que Nachita tuviese dificultades para respirar, de manera inmediata se traslado al hospital de la ciudad.
En el nosocomio se le atendió a la menor , fue trasladada a la capital del estado debido a lo delicado de su salud por la lesiones sufridas cuando la güera intento quitarle la vida.
La fotografía de Nachita fue proporcionada por su madre, quien sólo pide ayuda para que pronto su hija esté de nuevo en casa con sus tres hermanitas.
La madre de la menor renunció a su trabajo para poder cuidar de su pequeña hija y de momento no tiene como alimentar a sus otras tres hijas quienes esperan a Nachita con ansias.
La situación de la familia es de pobreza extrema.