Dijo que las cadenas comerciales no pierden porque manejan grandes volúmenes y presupuestos mientras que los pequeños productores deben hacer frente a la precaria situación económica propia y de los consumidores así como a los altos precios de los insumos. Por ese motivo señaló Dávila, buscan transformar el producto que ofertarán en aras de mantener tanto la preferencia como la actividad económica.
“Los que trabajan en la tortillería tradicional son gente de barrio y allí es donde queremos que se conserven los empleos. Vamos por la tortilla tradicional nixtamalizada, la que realmente nutre. Estamos trabajando en una tortilla altamente fortificada que contiene harina concentrada de amaranto, de frijol y de nopal pero necesitamos que el gobierno federal ponga interés y atención en este tema de la seguridad alimentaria que está en riesgo”.
Dávila Arteaga reiteró que trabajan con pérdidas pero buscan la forma de conservar los empleos y también la vía para mejorar la situación de quienes se dedican a la referida actividad.
“Sabemos que puede ser temporal pero necesitamos sumar voluntades. Queremos generar más empleos, en cada estado y municipio y motivar a los productores para que siembren el grano básico que es el maíz. Ya estuvimos con diputados y senadores, presentamos un punto de acuerdo por la seguridad y soberanía alimentaria solo se trata de agilizar las cosas porque la voluntad ya existe. Vemos esto como una emergencia y podría presentarse una crisis alimentaria muy aguda”, finalizó.