Los hechos ocurrieron en un apartamento de Commerce City, al norte de Denver, el pasado domingo, en medio de una fiesta.
A tres de las personas las identificaron como Humberto Arroyo, de 24 años de edad, Karina Rodríguez, de 29 años y Sam Márquez, de 32; estos dos últimos eran padres de una bebe de apenas cuatro meses.
Las otras dos víctimas eran mujeres, cuyas identidades están bajo reserva por la fiscalía, supuestamente porque a sus familiares no los notificaron todavía.
“Los cinco adultos cayeron muertos literalmente en el lugar donde consumieron las drogas. Estas drogas son aterradoras, muy peligrosas”, comunicó en rueda de prensa el fiscal del distrito 17 del estado de Colorado.
Fue otra persona que estaba en la fiesta y que no consumió drogas la que llamó al número de emergencias. Cuando llegaron los paramédicos y los policías, encontraron la “escena de terror”, de acuerdo a como los describieron.
Encontraron a seis personas que desmayaron y una de ellas era Cora Márquez, hermana de Sam, a quien trasladaron inconsciente al hospital más cercano del área, en donde permanece en cuidados intensivos.