A las 10:44 de la mañana del 31 de julio del 2018, en un momento capturado por un video de vigilancia, Sánchez dio a luz a su hijo a solas en su celda sin supervisión o tratamiento médico, a pesar de decirle en repetidas ocasiones al personal de la cárcel que estaba teniendo contracciones, según un demanda federal presentada en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos en Colorado el miércoles. La demanda sostiene que en lugar de “asegurarse de que Sánchez pudiera dar a luz en un entorno médico y seguro”, las enfermeras y agentes “despiadadamente la ignoraron y dejaron que diera a luz a solas durante horas”, obligándola a soportar la “horrible experiencia”.
“El dolor era indescriptible”, dijo Sánchez a KDVR en una entrevista el año pasado, “y lo que más me duele es el hecho de que a nadie le importó”.
La demanda, en la que se acusa al municipio y al condado de Denver, al Centro Médico de Salud de Denver y a seis personas involucradas, fue presentada meses después de que una investigación interna realizada por el Departamento del Sheriff de Denver dejara a sus oficiales libres de toda culpa, un resultado que dejó a la abogada de Sánchez, Mari Newman “profundamente decepcionada”.
“Eso nos demuestra que tan corrupto es realmente el sistema”, dijo Newman a The Washington Post. “Afirman haber hecho una investigación y su conclusión es que nada estuvo mal con el hecho de que una mujer nunca fue llevada al hospital y terminó dando a luz en una celda sucia y fría. Es realmente incomprensible”.
El 14 de julio del 2018, Sánchez, quien ya tenía más de ocho meses de embarazo, fue ingresada a la Cárcel del Condado de Denver por cargos de robo de identidad, de acuerdo con KDVR. Según la demanda, el personal médico tomó nota de su condición y determinó que aún faltaban poco más de tres semanas para la fecha del parto.