Equipos de rescate iniciaron los trabajos para tratar de salvar a las ballenas que se atascaron en la arena y en la playa.
El representante del Servicio de Parques y Vida Silvestre en Tasmania, Nic Deka, admitió que el avance que muestran los trabajos de rescate son lentos por las condiciones y la posición en la que quedaron los cetáceos en la arena.
«Básicamente, tomaremos los animales con las mejores posibilidades para empezar y aquellos con los que podamos lidiar. Algunos animales pueden ser simplemente demasiado grandes o estar en una ubicación inadecuada».
Se esperan más muertes
Antes de llegar las ballenas, indicó, que al menos un tercio ya había muerto, y la mayoría eran inaccesibles en barco.
Aseguró que este es el varamiento masivo más complicado que han enfrentado en los últimos años, por lo que se prevé que los trabajos duren varios días con el apoyo de 60 personas.
Deka agregó que las ballenas piloto sociales, podrían haber sido atraídas cerca de la costa para alimentarse o porque la manada siguió la desventura de algunos individuos.