Octavio Montoya, el conductor de la avioneta que se desplomó el viernes pasado en Guachochi, murió hoy, producto de las quemaduras que sufrió en el 20 por ciento de su cuerpo.
Su hijo Jorge, de 9 años, falleció el sábado pasado. Él tuvo quemaduras en el 40 por ciento de su cuerpo y sus órganos ya estaban afectados.
Ambos viajaban en una avioneta tipo Cessna, a la cual le falló el motor momentos antes de aterrizar.
Hoy por la mañana el hombre perdió la vida en el Hospital General