En un mensaje difundido en su cuenta de Twitter, RSF ha trasladado su pésame y ha dicho «estar de luto por la pérdida» del periodista. Así, ha señalado que están investigando las circunstancias de su muerte y ha recordado que «tener como objetivo a la prensa» en un conflicto armado constituye un «crimen de guerra».
Las autoridades de Ucrania han señalado que fue llevado a cabo con un proyectil y han alertado de que al menos cinco personas han perdido la vida. Tanto el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, como su ministro de Exteriores, Dimitro Kuleba, han denunciado los hechos y han lamentado que este mismo lugar ya fue escenario de una barbarie cometida por los nazis.
El 29 y 30 de septiembre de 1941, los nazis mataron a más de 33 mil judíos aquí. 80 años después, los nazis rusos atacan esta misma tierra para exterminar ucranianos», alertó Kuleba en su perfil de Twitter.
¿De qué sirve decir ‘nunca más’ durante 80 años, si el mundo se queda en silencio cuando cae una bomba en el mismo sitio de Babi Yar? (…) La historia se está repitiendo», señaló Zelenski al respecto.