La Alta Comisionada interina de la ONU para los Derechos Humanos, Nada Al-Nashif señaló que las Fuerzas Armadas solo deben intervenir en la seguridad pública de forma temporal y bajo supervisión de órganos civiles independientes.
El organismo señaló a través de un comunicado este viernes que el transferir a la Guardia Nacional a una secretaría dirigida exclusivamente para militares “deja efectivamente a México sin una fuerza policial civil a nivel federal”.
También señaló que el traspaso significa un retroceso para la seguridad pública basada en los derechos humanos.
Al-Nashif recordó que la militarización de las fuerzas de seguridad ha aumentado de forma constante desde 2002 y que eso “no se ha traducido en una reducción sostenible de la criminalidad”.
A su vez criticó las reformas apoyadas por el Senado, ya que no incluyen disposiciones que garanticen la supervisión civil de la Secretaría de Defensa Nacional: “la que plantea preocupaciones adicionales en materia de derechos humanos, incluso sobre rendición de cuentas”.