-Primer mentira: Se refiere a un contrato con la empresa de mi esposo del año pasado (2023), antes de que fuera directora.
-Segunda mentira: Los servicios los contrató el comité de adquisiciones del IMPLAN, no yo.
-Tercer mentira: Una servidora no es socia de la empresa. Todo está hecho dentro del margen de la ley de adquisiciones, si no la conoce no es mi culpa. Los servicios se prestaron y ahí están publicados.
-Cuarta mentira: A mi llegada al IMPLAN dicha empresa deja de tener posibilidades de ser contratada por el mismo IMPLAN.
En conclusión:
- Desgraciadamente Miguel La Torre con el respeto que me podría merecer, es un mentiroso, lamento que políticos así estén solicitando el voto a la gente.
Lamentó «que con mentiras se quiera agredir a mi persona y pues lamentable que se agreda a una mujer, eso es violencia política».