En una declaración conjunta cuyo contenido fue difundido por la Cancillería argentina, los países firmantes, reunidos en Santo Domingo, hicieron un llamado al «diálogo amplio, inclusivo y de buena fe para facilitar un acuerdo político que auspicie la reconciliación nacional» y la democracia en Venezuela y se comprometieron a «apoyar todos los esfuerzos en ese sentido, abogando siempre por una solución genuinamente venezolana».
Santo Domingo fue escenario de la ceremonia de asunción del Presidente Luis Abinader para un segundo mandato con la presencia de jefes de Estado y representantes de distintos países. Los países que suscribieron la declaración sostuvieron una reunión en el marco de su presencia en la capital de República Dominicana.
El manifiesto incluye a naciones de distintos continentes. Son Argentina, Canadá, Chile, República Checa, Costa Rica, Ecuador, España, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, Italia, Marruecos, Holanda, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Reino Unido, Surinam, Portugal y Uruguay. También lo suscribió la Unión Europea.
Los firmantes solicitaron la verificación independiente de los resultados contenidos en las actas electorales, preferiblemente por una entidad internacional.
«Toda demora en que esto suceda pone en cuestión los resultados publicados oficialmente el pasado 2 de agosto de 2024», sostuvieron.
Aunque las autoridades electorales declararon al Presidente Nicolás Maduro ganador de las elecciones del 28 de julio, aún no han presentado un recuento detallado de los votos para respaldar esa afirmación. Sin embargo, la Oposición reveló que recogió actas de más de 80 por ciento de las 30 mil máquinas de votación electrónica que muestran que Maduro perdió por un margen de más de 2 a 1 ante el candidato opositor Edmundo González.
En otro punto de la declaración los países pidieron que el Gobierno venezolano respete «las libertades fundamentales» de la población y «el derecho a manifestarse pacíficamente y a ejercer la libertad de expresión».
Al respecto mostraron su preocupación porque las denuncias de detenciones arbitrarias en Venezuela sin el debido proceso son «alarmantes» y requirieron la «inmediata liberación» de los arrestados.
La advertencia tiene lugar en vísperas de la protesta mundial a la que ha convocado la oposición venezolana para el sábado en más de 300 ciudades de Venezuela y de otros países para defender la victoria que atribuyen a González.
Por otro lado los firmantes pidieron «el urgente regreso a Venezuela de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos» e instaron al Gobierno de Maduro a que garantice las condiciones adecuadas para que pueda desempeñar su mandato.
También le requirieron que expida los salvoconductos que permitan a los seis opositores asilados en la residencia oficial de Argentina retirarse de forma segura del territorio venezolano. Esa sede diplomática quedó bajo custodia de Brasil cuando días atrás el personal argentino se retiró, tal como hicieron funcionarios de otras embajadas.
Asimismo exhortaron a Venezuela a recuperar la convivencia pacífica, la seguridad pública y la estabilidad política que «de acuerdo con informes de la Misión Internacional Independiente de determinación de hechos» sobre ese país del Consejo de Derechos Humanos de la ONU «están siendo amenazadas por las propias autoridades de seguridad venezolanas».
Antes de que se conociera la declaración, el presidente Abinader criticó durante su discurso de toma de posesión la falta de transparencia en las elecciones celebradas en Venezuela «sin ningún sustento documental por parte de las autoridades».
«Nos lleva a exigir la publicación de todas las actas electorales, su verificación por instituciones imparciales y el respeto al resultado emanado de la voluntad del pueblo venezolano», expresó Abinader.