Como en México y muchos otros países, Argentina también paró labores en las aulas, para seguirlas en línea, para evitar que los alumnos pierdan el ciclo escolar ante la pandemia del coronavirus.
Sin embargo, una maestra acude hasta las casas de sus alumnos, caminando hasta diez kilómetros, para hacerles llegar los trabajos, pues sabe que no cuentan con internet.
Para prevenir contagios, María no hace contacto físico con los estudiantes, sino que les deja las tareas afuera de sus casas.
“Mis alumnos no tienen internet y si tienen que comprar el paquete les cuesta. Algunos cuando tienen crédito me pueden mandar y otros no, se complica un poco”, dijo a una televisora local.
Posteriormente, María regresa por las tareas para calificarlas.