Los cuerpos de rescate temen por un aumento de las víctimas mortales, ya que aún no tienen la cifra de cuántas personas permanecen desaparecidas.
La tormenta fue registrada el martes por la tarde y causó avalanchas de lodo, que destruyeron varias viviendas y otras propiedades. Autoridades comentaron que en cinco horas cayeron más de 200 milímetros de lluvia, más de lo previsto para todo febrero, y hasta el día de hoy sigue lloviendo, pero con menos intensidad.
En la urbe continúan las labores de rescate y limpieza. El coronel del Cuerpo de Bomberos, Leandro Monteiro, informó que uno de los puntos más críticos es la sierra Morro da Oficina, donde la avalancha de piedra y barro destruyó varias viviendas.
La Gobernación de Río de Janeiro reforzó la llegada de material médico y de higiene para atender a los afectados, además de maquinaria, que están ayudando a Bomberos y Protección Civil en las labores de apertura y limpieza en varios puntos de la ciudad.
El martes, la Alcaldía de Petrópolis declaró el estado de calamidad pública y anunció la suspensión de las actividades escolares.
Este miércoles, el alcalde Rubens Bomtempo decretó tres días de duelo oficial por las muertes registradas por este desastre natural.