Yoon Suk Yeol, presidente de Corea del Sur, decretó la ley marcial en el país, medida extrema que suspende derechos y garantías, además de desplegar al Ejército, incluso con el envío de Fuerzas Especiales al Parlamento.

Corea del Sur atraviesa un clima de enfrentamiento político que escaló hasta la extraña declaratoria de ley marcial de la noche de este martes.

La ley marcial -que debe ser usada en casos extremos como guerras o golpes de Estado en un país- prohibió actividades del Parlamento y los partidos políticos, suspendiendo así derechos y garantías.

También ordenó censura militar de los medios, por tanto prohíbe “noticias falsas” y que tengan como objetivo “manipular la opinión pública”.

También las huelgas, paros laborales y manifestaciones fueron prohibidas.

Fuerzas Especiales del Ejército acudieron a asegurar el edificio y hasta enfrentaron a manifestantes.

Declaratoria ley marcial.

Lanzó el presidente Yoon Suk Yeol un discurso en cadena nacional, no anunciado con anticipación, dando a conocer que declaró la ley marcial y acusando que la oposición simpatiza con el enemigo Corea del Norte, llevando a cabo acciones que ponen en riesgo a Corea del Sur.

El Partido Democrático, la principal oposición, preparó una moción para destituir a fiscales y rechazar la propuesta de presupuesto, a lo que el presidente reaccionó con la extraña y fuerte medida que resulta aplicar la ley marcial.

Dijo que la oposición muestra un “claro comportamiento antiestatal”, es decir, en contra del Estado surcoreano, “dirigido a incitar a la rebelión” por oponerse a los planes del gobierno.

También acusó que la Asamblea Nacional, su parlamento, se ha vuelto “una guarida de delincuentes” que “paraliza” los asuntos del Estado en favor de Corea del Norte.

La medida recibió incluso el rechazo por parte del líder del Partido del Poder Popular, fuerza política a la que pertenece el presidente.

Cancelan ley marcial.

Después de la medida extrema, la Asamblea Nacional votó y bloqueó el decreto presidencial con 195 votos a favor.

Según la ley del país, el presidente está obligado a acatar la medida.

«El presidente debe levantar inmediatamente la ley marcial de emergencia tras la votación de la Asamblea Nacional. Ahora, la declaración de ley marcial de emergencia es inválida», anunció Woo Won-sik, el presidente de la Asamblea Nacional.

Luego las tropas especiales se retiraron del edificio del Poder Legislativo respetando la decisión aprobada.

Las acciones de empresas surcoreanas comenzaron a caer en la bolsa. Samsung desplomó 7%, el indicador ETF iShares MSCI South Korea con cien compañías surcoreanas que opera en Estados Unidos se derrumbó 6%.

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