Ayer, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) redujo la proyección de crecimiento para México de 2% a alrededor de 1.6% para este año, y lo fijó en 2% en 2020, ante un escenario de desaceleración mundial.
“Estoy contento: ‘que no vamos a crecer al 2% dicen ayer que al 1.5%’, todavía no termina el año, vamos a esperar. Ya tenemos una apuesta: les vamos a ganar en sus pronósticos y les vamos a ganar porque hay una variable, como ellos dicen en su lenguaje tecnocrático, que ahora nos ayuda mucho, ya no hay la corrupción que existía cuando ellos gobernaban”, afirmó el presidente.
El tabasqueño aprovechó para criticar los gobiernos de sus antecesores de los cuales lamentó que su política neoliberal no dio frutos en 36 años.
“Están muy molestos y entonces han agarrado esa cantaleta de que se va caer el crecimiento, como si ellos hubieran garantizado mucho crecimiento en 36 años, todos los días salen con eso, pero es cosa de ver los datos”.
El mandatario reprochó que el Banco de México, del que dijo es respetuoso de su autonomía, sólo tenga interés en el control de la inflación y no apoye el crecimiento del país.
“Ellos tienen que defender esa postura porque tienen como función principal el controlar la inflación. Debería tener como función controlar la inflación y apoyar el crecimiento, pero nada más están dedicados a eso”, subrayó.
En ese sentido, López Obrador aseguró que durante su administración se logrará crecer al 4% con el combate a la corrupción, fortalecimiento a la seguridad y llevando bienestar a los mexicanos.
El presidente también destacó un incremento del 7% en las remesas y agradeció su esfuerzo a los mexicanos que radican en Estados Unidos.