«Las leyes y el sistema no están para defender los derechos de los 160 asesinados y sus familias, sino para defender a quien los asesinó. Es por eso que ellos están muertos y él está libre. Esto es lo que defienden los apologistas del terrorismo y los financistas de los mismos», publicó Bukele en su cuenta de la red social Twitter.+
El mandatario se refirió a Rafael Antonio Wesley Ramos, cabecilla de la pandilla Mara Salvatrucha (MS-13), sentenciado en agosto de 2018 a 350 años de cárcel, pero liberado el 23 de abril tras vencer el plazo para declarar en firme su sentencia tras una apelación.
«Fue condenado en juicio a 350 años de cárcel por el asesinato de 160 personas, pero salió libre el jueves pasado porque su abogado presentó una apelación y la Cámara no resolvió en tiempo, la ley obliga a que entonces se ponga en libertad. Así las leyes en El Salvador», acotó Bukele en sus redes sociales.
Ramos fue uno de los pandilleros condenados en el caso conocido como Operación Jaque, contra la MS-13, y en su contra fueron presentadas pruebas que lo relacionaban con 160 homicidios, incluidos cuatro agravados, y delitos relacionados con el tráfico de drogas.
Las leyes salvadoreñas obligan a liberar a un imputado si pasa tres años en prisión sin que la condena esté firme ni existan apelaciones pendientes.
A raíz del reciente repunte en los homicidios, Bukele ordenó a la Dirección General de Centros Penales que implementara el estado de emergencia en las prisiones, durante el cual los miembros de diferentes pandillas fueron encerrados en celdas comunes y con las puertas tapiadas para impedir la comunicación con el exterior.