Diez minutos después del despegue, la cápsula de la misión NS-24 sin tripulantes que despegó desde el oeste de Texas, llevando material científico, aterrizó en el desierto, según una transmisión en directo. Este es el primer vuelo desde que un problema en el motor provocó un desplome en el 2022.
El cohete despegó con éxito del oeste de Texas a las 16:43 GMT. Y su motor principal, reutilizable, se posó sin problemas en las llanuras del sur de Estados Unidos.
La cápsula que contenía este equipo aterrizó con la ayuda de un paracaídas, y alcanzó una altitud de 107 kilómetros (66 millas) durante el vuelo de 10 minutos. La misión llevaba a bordo experimentos científicos, de los cuales más de la mitad fueron desarrollados con el apoyo de la NASA.
En el lanzamiento fallido de 2022, el cohete comenzó a desviarse de su rumbo poco después del despegue, lo que provocó que el sistema de escape se activara y catapultara la cápsula desde la parte superior. La cápsula aterrizó sin problemas, pero el cohete se estrelló.
Blue Origin lleva casi 20 años lanzando desde esta zona remota, al sureste de El Paso. La compañía lanzó sus primeros experimentos para la NASA en 2019 y sus primeros pasajeros en 2021, entre los que se encontraban Bezos y su hermano. El segundo equipo, unos meses después, incluía al actor de “Star Trek” William Shatner.