Cinco tiendas del ejército de los Estados Unidos que estaban destinadas a hospitales del campo de batalla han sido reutilizadas para albergar a hombres, mujeres y niños, incluidos los bebés, reportó el Daily Beast.
Dos de las tiendas se levantaron fueron erigidas la semana pasada en El Paso, Texas, lo que amplió la capacidad para ingresar a cientos de personas.
“Las carpas están cercadas por muros provisionales con alambres de púas, lo que prácticamente no deja espacio para que las personas salgan”, indicó la representante Nanette Barragán (D-CA), quien logró visitar las instalaciones a principios de abril con una delegación del Congreso.
Ella contó parte de las pésimas condiciones en que se tiene a los inmigrantes.
“Una mujer tuvo un bebé, un bebé de cinco meses y dijo que había estado allí durante cinco días. El bebé tenía ropa sucia”, dijo Barragán. “La situación no es saludable. La gente está en un espacio confinado, no se duchan, su ropa está sucia”.
A Barragán se le prohibió tomar fotos de migrantes, pero ella describió una escena de desesperación en el interior.