Los principales directivos de la Premier se reunieron la noche del lunes con la policía tras ser informados por los 20 clubes de que querían jugar en casa, pese a que no se permita la presencia de público en las gradas.
Mark Roberts, el responsable de la policía para la seguridad en los estadios de futbol en Inglaterra, había expresado el temor de que los hinchas de los equipos se congregarán en las afueras de los estadios y provoquen movilizar a agentes cuando se empiezan a relajar el confinamiento nacional.
Pero Roberts aflojó en su posición tras consultas “positivas” con la liga y el gobierno.
“En conjunto vamos a explorar varias opciones para seguir adelante, las cuales minimizarán los riesgos de salud pública y presión innecesaria en los servicios públicos, pero que facilita una reanudación segura de la temporada, apoyando los beneficios en lo económico y de ánimo asociados con el deporte», dijo Roberts.
El primer ministro británico Boris Johnson anunció el lunes que el deporte profesional podrá reactivarse en junio si no hay un nuevo incremento de las infecciones de COVID-19.
Pero, con centenares de decesos cada día, el alcalde de Londres, Sadiq Khan señaló el martes que es demasiado prematuro realizar partidos en la capital, donde juegan cinco clubes de la Premier.
“A Sadiq le preocupa la salud de los jugadores involucrados en todos los deportes profesionales, no sólo el futbol», dijo el alcalde en un comunicado. “Tenemos enormes interrogantes sobre cómo los jugadores pueden entrenarse de manera segura, cómo se desplazarán a los partidos y cómo disputarán los partidos oficiales sin riesgo de propagar la infección”.
El gobierno se propone divulgar una estrategia esta semana que permitirá a los jugadores volver a los entrenamientos en grupos, aunque se recomienda mantener el distanciamiento social al resto de la sociedad.
“Se trata de ir paso a paso. ¿Cuánto tiempo necesitamos para volver a los entrenamientos de contacto a pleno», dijo el director ejecutivo de la Liga Premier, Richard Masters a la prensa. “Ello depende sobre el tipo de contacto físico para asegurarse que el futbolista no se expone a nada, inclusive en esa situación de entrenamiento. Se trata de algo que deberemos lidiar caso por caso”
Han transcurrido dos meses desde que se disputaron los últimos partidos antes que el campeonato fue suspendido durante la pandemia.
“Hay algo que es seguro. Todos los clubes tendrán que priorizar la salud y velar que sus jugadores estén bien físicamente antes de tomar la decisión de volver a las canchas, dado a que han tenido una larga inactividad», dijo Masters.
“Hemos hablado de cuatro semanas de entrenamiento, pero aún no tenemos un acuerdo ya que no se ha decidido cuándo se volverá a entrenar”, añadió.
Masters dijo que se consultará a los jugadores sobre cómo tener un ambiento seguro en los entrenamientos y luego en los partidos.
“Está bien que tengan sus inquietudes y preguntas. Nosotros necesitamos atenderlas primero», dijo Masters.
Los jugadores y entrenadores deberán someterse a pruebas frecuentes en sus ciudades deportivas por la COVID-19.
Masters no anticipa que un plantel completar deberá aislarse si se produce una situación como la del Dínamo Dresden la semana pasada. Dos jugadores del club de la segunda división alemán dieron positivo por coronavirus, y el resto del plantel, técnicos y ayudantes tendrá que pasar 14 días de cuarentena en sus casas.
“Si un jugador da positivo, y ha cumplido con los protocolos de distanciamiento social, estará aislado durante un periodo de tiempo, pero no habrá necesidad de que el resto tenga que hacerlo», dijo Masters.