En un momento en que los casos de coronavirus están aumentando en todo el país, el número de pacientes infectados se ha más que duplicado en el último mes a un récord de casi 100.000, provocando que los centros médicos y trabajadores de salud se encuentren saturados de trabajo.
«Los enfermeros están bajo enorme presión ahora”, dijo Kendra McMillan, asesora de políticas para la Asociación Estadounidense de Enfermeras. “Hemos escuchado de enfermeros en el frente que dicen que nunca habían experimentado el nivel de agotamiento que estamos viendo ahora».
Los gobernadores de estados muy afectados como Wisconsin y Nebraska están facilitando las cosas para que los enfermeros vuelvan de su retiro, incluido dispensarles los requerimientos de licencias y pago de cuotas, aunque puede ser complicado lograr que el personal de edad avanzada quiera regresar debido a que estaría en mayor peligro que muchos de sus colegas en caso de que contraiga el virus.
Algunos están tomando empleos que no involucran trabajar de manera directa con pacientes de COVID-19 con el fin de ayudar a que haya más personal disponible para estar con los enfermos, comentó McMillan.
Iowa está autorizando licencias temporales y de emergencia para enfermeros nuevos que han cumplido con los requisitos educativos del estado, pero aún no presentan su examen estatal de certificación. Algunos hospitales de Minnesota están ofreciendo pasantías en el invierno boreal a estudiantes de enfermería para aumentar su personal.
Las pasantías generalmente se ofrecen en el verano, pero este año fueron canceladas a causa de la pandemia.
Los hospitales también están recurriendo a contratar a enfermeros que a menudo viajan de otros estados. Sin embargo, es costoso debido a que los hospitales del país están compitiendo por el mismo grupo de enfermeros, lo que está elevando los salarios a incluso 6.200 dólares semanales, de acuerdo con anuncios para empleos de enfermeros itinerantes.
Hay también una elevada demanda de médicos.
Hasta ahora, Estados Unidos ha reportado más de 270 mil decesos a causa del coronavirus y 13,8 millones de casos confirmados. Las infecciones nuevas están promediando más de 160 mil al día, y se están registrando unas 1.500 muertes diarias, un nivel visto por última vez en mayo, durante la crisis en la zona metropolitana de Nueva York.
Para hacer espacio a los más enfermos, las instituciones fuertemente afectadas están enviado a casa a algunos pacientes con COVID-19 que de lo contrario habrían sido hospitalizados. También están cancelando cirugías que no son urgentes o enviando a pacientes adultos que no tienen COVID-19 a hospitales pediátricos.