Rosa Icela proporcionó detalles sobre el caso, basándose en la información obtenida de las autoridades estadounidenses. Según la embajada de Estados Unidos en México, las Fuerzas del Orden en el país vecino fueron informadas en varias ocasiones sobre la posible intención de Joaquín Guzmán López de rendirse. Sin embargo, esta intención nunca se concretó.
El 25 de julio de 2024, alrededor de las 10:30 horas, las autoridades estadounidenses recibieron informes sobre la posibilidad de que Guzmán López planeaba rendirse al ingresar a Estados Unidos en un vuelo privado. Más tarde, a las 14:35 horas, se notificó que Guzmán López estaba en un vuelo desde México con destino a Estados Unidos con la intención de entregarse. No obstante, las autoridades no recibieron un aviso previo ni confirmación independiente sobre su presencia en el vuelo.
Además, a las 14:40 horas, se alertó sobre la posible presencia de Ismael Zambada García en el mismo vuelo, aunque nuevamente, no hubo confirmación independiente de su participación. El vuelo aterrizó en el aeropuerto de Santa Teresa, Nuevo México, a las 16:24 horas. Las autoridades estadounidenses interceptaron el avión y detuvieron a los dos pasajeros al descender, ya que el vuelo no fue organizado por ninguna agencia gubernamental estadounidense.
Una vez confirmadas las identidades de los pasajeros, el Gobierno mexicano fue informado de inmediato. La embajada estadounidense en México proporcionó fotografías de los sospechosos al gabinete de Seguridad mexicano. En respuesta, la FGR ha iniciado la carpeta de investigación federal 1882/24 en Sonora para abordar los delitos asociados con el caso. Las diligencias ministeriales, policiales y periciales están en curso para esclarecer el origen y destino del vuelo, así como los eventos relacionados.