El pequeño, Tinotenda Pundu, se adentró en el Parque Nacional de Matusadona, cerca de su aldea, el 27 de diciembre y fue encontrado cinco días después unos 50 kilómetros más adentro, precisó Tinashe Farawo, portavoz de la Autoridad de Parques y Vida Silvestre de Zimabue (ZimParks).
De acuerdo a informes el pequeño sobrevivió alimentándose de bayas silvestres y de agua que encontró cavando en la orilla de un río, una técnica muy conocida en las zonas de Zimbabue propensas a la sequía.
Guardias del parque, habitantes locales y la policía lanzaron operaciones de búsqueda inmediatamente después de conocerse la desaparición del menor, pero sus intentos fueron infructuosos debido a las fuertes lluvias.
El 30 de diciembre se descubrieron huellas del niño, que finalmente fue hallado al día siguiente por la mañana, según el portavoz de ZimParks.
Tinotenda Pundu fue trasladado al hospital, pero no tenía heridas visibles, indicó Mutsa Murombedzi, una parlamentaria originaria de la zona. «Es un milagro que haya sobrevivido», señaló a AFP.
El Parque Nacional de Matusadona, cerca del lago Kariba, alberga una gran variedad de animales salvajes, incluido leones, elefantes, leopardos y búfalos, según su página web.