Fue poco antes de las siete de la mañana cuando las autoridades tuvieron conocimiento de que a la altura de Pedernales estaba un carro estacionado a un lado de la carretera.
Al lugar llegaron agentes de la Policía Municipal quienes vieron un auto que tenía una de las puertas abiertas y presentaba rastros de sangre e impactos de bala.
El auto en el que se encontraron los cadáveres es un Grand Marquis color arena, modelo 1999, sin placas de circulación.
Los cadáveres fueron abordados a la caja de una pick up de la fiscalía. Esta vez no acudió unidad del semefo para hacer el traslado.
Por el momento las víctimas permanecen sin identificar.