Los hechos ocurrieron en la ciudad de Kent, Michigan, Estados Unidos.
Se trata de Abrianne Moore, una mujer de 28 años quien llevó a sus hijas a un bosque situado detrás de la casa de sus bisabuelos y las fusiló con un rifle de caza.
Autoridades de la localidad indicaron que luego del asesinato la mujer metió los cuerpos a la cajuela de su automóvil y condujo hasta su casa donde también se quitó la vida.
El marido de la mujer fue quien encontró su cuerpo al regresar a casa.
«No sabemos lo que estaba pasando por su cabeza, no dejó una nota de suicidio ni nada de eso. La madre parece haber estado luchando con problemas de salud mental bastante importantes. Ella tenía algunas publicaciones en Facebook y cosas por el estilo que la llevaron a creer que estaba paranoica y pensó que las niñas estaban en peligro de alguna manera. Sospechamos que eso condujo a los acontecimientos de este día», comentó el sheriff Michelle LaJoye-Young.
El marido comentó que Moore había mantenido a sus hijas fuera de la escuela pues decía que la televisión le anunciaba que serían víctimas de un terrible accidente.
Información de Excélsior