Esto lo habrían revelado funcionarios y exfuncionarios de la DEA cuando reclutaron a miembros de la familia para poder dar con su paradero tras trece operativos fallidos para detenerlo.
Además el Washington Post agregó que funcionarios y exfuncionarios de la DEA confirmaron que tuvieron participación en la detención del narcotraficante, esto a pesar de las declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador de que sólo el gobierno mexicano llevó a cabo la operación.
Agregaron que varias de las operaciones que llevaron a cabo y que fueron fallidas, no fueron reportadas previamente, los funcionarios atribuyen esto a filtraciones mexicanas de alto nivel: “una señal de que el gobierno mexicano lo estaba protegiendo”.
Washington Post aseguró que las autoridades estadounidenses sabían dónde vivía Caro Quintero en la zona rural de Sinaloa a tan solo unos metros de la base militar mexicana en un pueblo, según informaron, era custodiado por equipos de seguridad que rotaban cada semana.