La Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES) dijo que en la masacre de Bavispe fueron empleados fusiles de asalto calibre .223 y 9 milímetros, similares a las armas largas empleadas por los policías. En las escenas resguardadas donde ocurrieron los nueve asesinatos fueron asegurados más de 200 casquillos percutidos de estos calibres.
En el caso del supuesto sicario detenido en la frontera de Agua Prieta, durante el operativo de búsqueda de los responsables de la masacre, fueron aseguradas dos armas largas calibre .223, otra calibre .308, diez cargadores calibre .223, un cargador abastecido .308 y un rifle largo Barret calibre 50, conocido como “matapolicías” por su capacidad para perforar blindajes, informó la FGJES.
Ayer la FGJES participó en la reunión con el embajador Christopher Landau, como parte de la agenda del encuentro de la Comisión Fronteriza Sonora-Arizona celebrada en la ciudad de Hermosillo y programada antes de los hechos violentos en los que perdieron la vida los nueve ciudadanos estadunidenses abatidos por las balas.
La fiscal estatal Claudia Indira Contreras dijo que el gobierno de Estados Unidos ha manifestado el apoyo a las investigaciones que realizan tras el asesinato de nueve integrantes de las familias Miller, Langford y LeBaron, residentes de la comunidad “Las Moras”, municipio de Bavispe.
Durante las actividades desarrolladas este martes como parte de la agenda de las Comisiones Sonora-Arizona y Arizona-México, encabezadas por la gobernadora Claudia Pavlovich Arellano y Christopher Landau, embajador de Estados Unidos en México, fue abordado el tema de la coordinación interinstitucional.
La fiscal dijo que recientemente se trabajó con el Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) por el caso de un secuestro ocurrido de aquel lado de la frontera, pero descartó que el personal de la agencia se encuentre en la escena del crimen.
Christopher Landau, embajador de Estados Unidos en México, expresó su pésame para las familias de las víctimas de los hechos en la frontera Chihuahua y Sonora, ciudadanos estadounidenses.
Que subrayan el gran desafío que tienen tanto Estados Unidos como México para combatir juntos a la delincuencia y el crimen organizado, dijo.
“No tiene sentido andar echando la culpa el uno al otro por estos problemas de seguridad que se viven ahora, estos son retos compartidos y los malos son los delincuentes y los criminales”, dijo el canciller .
Landau hizo un llamado al trabajo en equipo para hacer frente a los asuntos de seguridad que afectan de ambos lados de la frontera.
“Estos son retos compartidos, y los malos son los delincuentes y los criminales, y ya es hora de poner mano a la obra y vencer a estos criminales organizados, que son muy poderosos, esto no va ser una tarea fácil, esto no se va hacer de un día para otro, pero todos los viajes comienzan de un paso”, indicó.