Netanyahu dijo que un alto el fuego general obstaculizaría el esfuerzo bélico de su país, pero que la pausa de los combates por razones humanitarias, una idea apoyada por el principal aliado de Israel, Estados Unidos, seguiría considerándose en función de las circunstancias.
«En cuanto a las pequeñas pausas tácticas -una hora aquí, una hora allá- ya las hemos hecho antes. Supongo que comprobaremos las circunstancias para permitir la entrada de bienes, bienes humanitarios, o la salida de nuestros rehenes, rehenes individuales», dijo Netanyahu a ABC News el lunes.
«Pero no creo que vaya a haber un alto el fuego general».
El Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló el lunes con Netanyahu sobre esas pausas y la posible liberación de rehenes en una llamada telefónica, en la que reiteró su apoyo a Israel al tiempo que subrayó que debe proteger a los civiles, según la Casa Blanca.
Las Naciones Unidas, las ONGs, los líderes árabes y otros países del mundo piden sin cesar un alto el fuego.
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, exigió urgentemente un «alto el fuego humanitario» en el pequeño territorio palestino, transformado en un «cementerio para niños».
«La pesadilla en Gaza es más que una crisis humanitaria, es una crisis de la humanidad», dijo.
Los bombardeos israelíes en Gaza dejaron 10 mil 328 muertos, la mayoría de ellas civiles, incluidos más de 4 mil niños, según el último balance del Mnisterio de Sanidad de Hamas el lunes.
«Miles y miles de civiles mueren. Nuestros hombres han sido asesinados. Nuestros voluntarios han muerto», señaló el jefe de la Media Luna Roja Palestina, Yunis Al-Khatib.