¿Alguna vez te has preguntado cuáles son los animales más peligrosos en México? Recientemente la revista Nature realizó una compilación en l que mostraron las cinco especies de algunos países nombradas “las más peligrosas” debido a las cualidades de su veneno; aqui te la compartimos:
- Viuda negra
Viuda negra o Latrodectus mactans; se encuentra presente en casi todo el territorio nacional; se caracteriza por tener un abdomen negro con manchas roja en la parte inferior además de finas patas y no suelen ser de gran tamaño.
Posee propiedades neurotóxicas, capaces de provocar parálisis en algunos músculos; de no recibir atención adecuada tras su mordedura, el ser humano puede tener consecuencias letales.
- Coralillo
La serpiente coralillo suele encontrarse en los estados de Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Veracruz y Chiapas, así como al norte de México. Su apecto físico se confirma a base de anillos de colores naranja, rojo, amarillo y negro.
Su tamaño es considerablemente pequeño y suelen ser delgadas.
- Araña violinista
Del género de las Loxosceles, suele encontrarse en la Ciudad de México, Puebla, Tlaxcala y Estado de México. Su veneno produce inflamación, dolor y fiebre, además de descomposición en los tejidos afectados, por lo que tras su mordedura, debe acudirse a un hospital rápidmente.
De aspecto pequeño, con patas gruesas, suele esconderse en lugares o cuartos poco frecuentados, así como en zonas cerradas y rincones, donde hace sus telarañas.
- Serpiente de cascabel
Localizada principalmente al norte del país en las zonas desérticas, este tipo de serpientes suelen atacar únicamente cuando invaden su hábitat.
Son fáciles de identificar debido al sonido que produce el cascabel al final de su cuerpo. Su mordedura produce hinchazón en la zona afectada, dolor muy intenso y en ocasiones taquicardia; de no atenderse rápido, la mordedura del anfibio puede provocar fallas renales mortales.
- Monstruo de Gila
Ubicados en desiertos y llanuras, los monstruos de gila son lagartos pequeños pero gruesos cuyo aspecto de lunares de colores en sus escamas y protuberancias es fácil de identificar.
Su mordedura, así como la del escorpión, el lagarto enchaquirado y el lagarto moteado tienen un veneno con toxinas que provoca asfixia, dolor e hipotermia a sus víctimas y lo utilizan como mecanismo de defensa, por lo que su mordedura puede ser fatal.
Debido a que suele ser pesado y su movilidad, lenta, casi no hay registros de ataques del mismo en México.