Desde las 8:00 de la mañana, los inconformes, provenientes de Haití, África y Asia, intentaron salir de la sede Migratoria, pero fue impedido por la Policía federal, navales y guardias de seguridad privada.
Las mujeres que pedían auxilio denunciaron que sus hijos se encuentran enfermos con temperatura y tos debido a la picadura de zancudos y la humedad en las instalaciones.
Denunciaron presunto maltrato físico y verbal, así como discriminación de parte de las corporaciones policiacas.
Hasta las 10:00 de la mañana, los migrantes se encontraban dialogando con las autoridades.