Agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Guardia Nacional, que han sido exhibidos cometiendo abusos como patear la cabeza de un migrante en Huxtla el sábado o persiguiéndolos adentro de hoteles e iglesias, trataron de disuadir esta madrugada a la cuarta caravana cuando se preparaba para salir en el Jardín Hidalgo de Tapachula.
Los agentes llegaron desde las 06:00 horas y armaron un operativo para requerir la documentación de visitantes legales, pero, a pesar de eso, la cuarta caravana de hombres y mujeres adultos, niños y bebés en brazos logró avanzar sobre la Carretera Tapanetepec-Talismán y han cruzado ya el poblado de Viva México, donde se encuentra el primer retén de migración.
Los ciudadanos migrantes que huyen de la pobreza y la violencia en sus paisas avanzan gritando «¡Sí se puede! ¡Sí se puede!» o «¡El pueblo unido, jamás será vencido!».
En la delantera de la cuarta caravana avanza cargando una niña de dos años Nilton Lizandro, un guatemalteco que perdió a su esposa y sus otros tres niños la tarde del lunes, cuando agentes migratorios mexicanos intentaron desintegrar a la segunda caravana en la entrada a Mapastepec.
«Ellos me están esperando, ellos están esperando que yo suba para poder reunirse porque a ellos les dieron un documento de que tienen 20 días para abandonar el País por el sur, entonces van agarrar un autobús a Arriaga y con ayuda de Dios ahí nos vamos a juntar», dijo Lizandro.
Sin embargo, la Guardia Nacional y el INM han realizado operativos de detención a todas las caravanas que han salido de Tapachula.
A la primera la enfrentaron el sábado en Huixtla, justo cuando el Presidente Andrés Manuel López Obrador llegaba a inaugurar un hospital; a la segunda, afuera de Mapastepec el lunes; y este viernes realizaron detenciones en Huixtla y Escuintla, donde incluso se metieron a los hoteles a sacar a huéspedes.
«Vamos a seguir conteniendo (migrantes)», advirtió el domingo el Presidente quien ha presentado como un logro de su Gobierno el récord de remesas que han enviado los migrantes mexicanos desde Estados Unidos y quien al inicio de su Gobierno invitó a los migrantes centroamericanos a venir a México.
«Habrá trabajo para nosotros y para los que necesiten de nosotros, que vengan de otras partes. ¿Qué decimos en las familias? donde come uno, comen dos. ¿No es así? Eso es lo que vamos a llevar a cabo, esa solidaridad», dijo el 21 de octubre de 2018 en Chiapas, ya como Presidente electo.