Sus vecinos se extrañaron de que la puerta de su domicilio permaneciera abierta por varios días y él solía sentarse afuera de su domicilio a ingerir bebidas alcohólicas. Al no verlo y al notar olores fétidos que salían de su vivienda ingresaron para ver si todo estaba bien. Lo encontraron sin vida en una recámara.
Tenía cerca de tres o cuatro días de haber muerto, su cuerpo ya se encontraba en estado de descomposición.
Elementos de la Policía Municipal se hicieron cargo de acordonar el lugar. Agentes ministeriales tomaron nota del hecho. Personal del Servicio Médico Forense trasladó el cuerpo a las instalaciones del C4 para practicarle la necropsia de Ley correspondiente.